
La primera jornada de clausura al tráfico de la zona Centro por motivo de la contaminación atmosférica se ha desarrollado sin mayores problemas. El centro de la ciudad presentaba un aspecto despejado de vehículos a excepción de bicicletas, transporte público, emergencias, residentes y vehículos de reparto. Según informa la Policía Municipal: “Se han producido muchas peticiones de información relativas a cada caso individual y concreto, tanto en llamadas al Centro de Operaciones como en consulta directa a los policías en la vía pública”, destacan como única incidencia reseñable asegurando que “puede decirse que los ciudadanos han aceptado la medida restrictiva de buen grado”.
Los aparcamientos de Reyes católicos, Moreras y Calle de la India han registrado un lleno completo, mientras que otros como el de la Feria de Muestras ha alcanzado un 75% de ocupación frente al 45% habitual. Es también representativa la bajada del 75,18% en las operaciones de los expendedores de la ORA respecto al día anterior.

Según los datos recogidos por las estaciones medidoras de contaminación, tres de ellas han parado en su evolución ascendente, mientras otras dos, Valladolid Sur y Michelin 2, siguen una tendencia más elevada aunque retardada en cuanto al momento en el que van alcanzando cotas con respecto a lo que sucedía días anteriores. Según informa el Ayuntamiento de Valladolid: “El objetivo de la medida es el de provocar una reducción de las emisiones para que no se genere ozono por la vía más rápida por ello se puede decir que la situación mejora despacio con respecto a los días de máximo impacto y que la medida debe mantenerse para permitir que la atmósfera se descargue de precursores y se pueda iniciar una semana con la atmósfera más limpia”.
La Federación de Asociaciones Vecinales de Valladolid ha emitido una nota de apoyo a la medida: “Esta Federación entiende que el derecho a la salud de toda la ciudadanía, y en especial de las personas más sensibles a la contaminación por ozono (personas mayores, infancia…) debe estar por encima del derecho, también reconocido, a circular libremente en vehículos a motor. Las molestias originadas deben verse como un ‘mal menor’, en relación a los problemas que una alta concentración de ozono puede causar a la salud: incremento del riesgo de enfermedades respiratorias agudas, reducción de la función pulmonar y agravamiento de patologías cardiovasculares”. Piden la colaboración y compresión de la ciudadanía, a la vez que agradecen al consistorio y en especial a quienes están al frente de las concejalías más afectadas, María Sánchez y Luis Vélez, por “tomar una decisión necesariamente difícil e impopular, pero que va en beneficio de la salud de todos y todas”. Postura compartida por Ecologistas en Acción, que celebran como por primera Valladolid restringe durante cuatro días la circulación de automóviles para reducir los niveles de este contaminante atmosférico.

No obstante, Pilar Vicente, portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento, tilda el corte de tráfico en el centro de `Carmenada´, cuando “Valladolid no está en la misma situación que otras grandes capitales, como puede ser Madrid”. Sumándose a lo expresado ayer por el Partido Popular, asegura que la medida “es Podemos e IU en todo su esplendor”. En su opinión no hace más que agravar la situación de la zona centro sin ofrecer “verdaderas alternativas” como “autobuses gratuitos y lanzaderas desde los aparcamientos disuasorios”. La Agrupación vallisoletana de Comercio, AVADECO, critica también la medida por precipitada. Mostrándose “conscientes y sensibles” con la salud de los vallisoletanos, llaman a no caer en el alarmismo en esta ocasión ya que “se demuestra, y los datos así lo ratifican, que las estaciones más críticas se encuentran alejadas del centro urbano”.