
La Federación de Asociaciones de Vecinos Antonio Machado centrará su acción de trabajo en una apuesta transversal por lo social y el bienestar de las personas reclamando un reparto equitativo de las infraestructuras entre los barrios. Así lo ha acordado esta mañana en el transcurso de la celebración de su asamblea general anual en la que se ha aprobado también la Carta Ciudadana 2019-2023: un pacto por la participación de la ciudadanía en el Gobierno de la ciudad de Valladolid.
Las Asociaciones Vecinales entienden que “los grandes debates y estrategias urbanas deben ser fruto de una construcción cotidiana, partiendo siempre de las demandas y necesidades colectivas expresadas por la ciudadanía” y por eso quieren “situar a ésta y su plural visión de la vida en el centro de todas las decisiones y cooperar en la renovación de la democracia desde una ciudadanía activa que construye la ciudad directamente junto con otros vecinos y vecinas y organizaciones ciudadanas, en contacto con las diferentes administraciones públicas para el mutuo intercambio de pareceres, prioridades y soluciones”.
Así se indica en ese documento que en realidad es la hoja de ruta que los colectivos vecinales de la ciudad proponen a los partidos políticos de cara a su desarrollo en la próxima legislatura que se avecina: “La ciudadanía organizada quiere participar sin la necesidad de defender con una energía desproporcionada este derecho, y quiere que se la tenga en cuenta para configurar un modelo de ciudad de y para todas las personas”.
El pacto por la participación que proponen los vecinos está abierto a todas las organizaciones políticas que deseen suscribirlo e incluye los objetivos a desarrollar para el próximo cuatrienio que, en el apartado referido a la infraestructuras señala que “todo crecimiento precisa una infraestructura apropiada y la garantía de su correcto mantenimiento”. “Esta gran responsabilidad reposa tradicionalmente en la Administración local que proporciona en gran parte las infraestructuras indispensables en la vida de la ciudad” y por eso exigen “la absoluta transparencia en todos los procedimientos urbanísticos y en especial los ligados a la Integración Ferroviaria, no abandonado la búsqueda de alternativas que consigan el soterramiento del ferrocarril y permitiendo a la ciudadanía el acceso a la información y a la participación en el diseño”.

La Carta Ciudadana es también una demanda expresa de más participación: “Siendo la participación un derecho básico de la ciudadanía y un valor clave de la democracia, se entiende que ha de desarrollarse en su vertiente representativa, sin delegación alguna, por ello, exigimos el derecho de todos a participar en política”. “La participación ha de estar regulada en todos los ámbitos de actividad social y política. Participar es, además de un derecho, una obligación para todas las personas, por lo que no cabe imponer limitaciones a la democracia participativa. Además de participar depositando el voto cada cuatro años, se ha de formar parte de un engranaje que practique y evalúe las actuaciones realizadas en la mejora de la ciudad Entendemos que se padece una crisis de participación que afecta también a las asociaciones, por lo que, al margen de las actuaciones que han de promoverse para afrontar esta crisis, en la corporación municipal debe de existir un firme compromiso para propiciar la participación, dotando de recursos necesarios a las asociaciones para que éstas puedan cumplir sus funciones”.
En el transcurso de la Asamblea General celebrada este año en el Centro Cívico de Pilarica también se ha aprobado una moción titulada por “El equilibrio territorial de las dotaciones en los barrios de Valladolid” en la que se indica la necesidad de elaborar “un mapeo de las necesidades reales de cada barrio, donde se fijen los criterios que definan el llevar una dotación a un barrio o a otro, para que con estos criterios claros no haya motivos para la generación de conflictos interbarrios”. Los vecinos entienden que igualmente es necesario definir, “al menos en el ámbito municipal un plan de actuaciones donde cada barrio sepa cuando le toca o está previsto que llegue la dotación municipal, evitando la arbitrariedad de la oportunidad política del momento, el bienestar vecinal no puede estar condicionado a que partido político está en el Ayuntamiento”.
Al aprobar esta moción la Federación entiende que “se está posicionando por la igualdad de oportunidades en todos los barrios de Valladolid, evitando el favoritismo y deseando un estado de bienestar igualitario no condicionado al tema de dotaciones”.
A la celebración de esta asamblea, en su tramo final, como viene siendo habitual, han asistido el alcalde Óscar Puente, el portavoz de su grupo, Pedro Herrero, Rafaela Romero, así como los concejales de Valladolid Toma la Palabra María Sánchez, Alberto Bustos y Manuel Saravia, además de Charo Chávez de Sí se Puede y el portavoz del PP en el Ayuntamiento, José Antonio Martínez Bermejo, el único que, según los vecinos, ha aprovechado el tradicional saluda a las organizaciones vecinales para hacer campaña a favor del soterramiento que su partido prometió y fue incapaz de desarrollar durante los 20 años consecutivos que gobernó en la ciudad.