La Asociación Contra la Tortura y el Maltrato a los Animales (ACTYMA) ha presentado una denuncia ante el Delegado Territorial de la Junta de Castilla y León en Valladolid contra el Alcalde de Tordesillas, José Antonio González Poncela, “y contra todos quienes fueran responsables de las presuntas infracciones acontecidas en el encierro del Toro de la Vega celebrado el día 12 de septiembre de 2017 en la localidad de Tordesillas”. Según sus alegaciones, el festejo taurino es un encierro ilegal ya que incumplió el Decreto 14/1999 por el que se aprueba el Reglamento de Espectáculos Taurinos Populares de la Comunidad de Castilla y León, el Reglamento (CE) Nº 1099/2009 del Consejo de la Unión Europea, relativo a la protección de los animales en el momento de la matanza, y la Reglamentación Electrotécnica.
Según ACTYMA, el Encierro del Toro de la Vega “no corresponde a lo ordenado en el Decreto 14/1999, no es calificable como encierro urbano, ni de campo, ni como encierro mixto, puesto que el toro recorrió las calles de Tordesillas antes de entrar al campo, y tampoco se puede calificar como encierro mixto porque el toro no iba acompañado de cabestros, por tanto, este festejo es un encierro ilegal”.
Según explican, los caballistas participantes pincharon al animal en varias veces con picas “sin otro motivo que la de reproducir el alanceamiento de antaño en el Torneo del Toro de la Vega”. Al finalizar dicho encierro, según indican desde ACTYMA, se procedió a la aplicación de sedante con cerbatana o jeringa de garrocha quedando el toro inmovilizado, que no fue dirigido a corral alguno de la Vega ni hacia el camión de recogida, sino que se lo llevó una pala excavadora.
Por todo esto, la Asociación Contra la Tortura y el Maltrato a los Animales solicita que se incoe un expediente sancionador contra el Alcalde de Tordesillas, José Antonio González Poncela, y contra todos quienes fueran responsables de las presuntas infracciones que, según describen, acontecieron en el encierro del Toro de la Vega 2017.
