
José Ramón Barrueco, secretario y portavoz de Stop Uranio, informó de las intenciones que la empresa de orígen autraliano Berkeley Minera España S.L. tiene, desde hace 10 años, de abrir minas de uranio a cielo abierto en la provincia de Salamanca cerca de la frontera de Portugal. La profesora universitaria Margarita Mediavilla, previamente, hizo una introducción del panorama energético.
'¿Minas de uranio en campo charro? ¡No gracias!' fue el título de la charla del Jueves Republicano celebrada el 23 de noviembre, en el Ateneo Republicano de Valladolid, en la que participaron Margarita Mediavilla, del Grupo de Investigación en Energía Económica y Dinámica de Sistemas de la Universidad de Valladolid, y José Ramón Barrueco, secretario y portavoz de Stop Uranio, presentados por Raúl Garrido, de ARBA.
"Berkeley lleva 10 años gastando dinero sin vender un gramo de uranio", manifestó José Ramón Barrueco que, además de ser representante de Stop Uranio, es trabajador de la Junta de Castilla y León y concejal de EQUO en Villares, uno de los municipios afectados por el proyecto de Berkeley Minera España S.L., sociedad que "nació con una finalidad especuladora que después dijo tener el certificado de calidad minera aunque todavía no ha explotado nada y solo hace que soltar pasta".
Barrueco, tras explicar la tramitación administrativa en los distintos ámbitos -local, regional y estatal- realizados por la empresa desde que anunció hace 10 años su intención de abrir varias minas a cielo abierto en el campo charro donde también tiene intención de instalar una planta de residuos radioactivos, criticó las facilidades dadas por la Junta de Castilla y León.
"La concesión minera la firmó en 2014 el fallecido Tomás Villanueva. Otros nombres relacionados con el proyecto son los del exministro dimitido José Manuel Soria; el también exministro y hoy en el Parlamento Europeo Arias Cañete y su amigo Manuel Lamela. Se dice que detrás está también un cuñado de José María Aznar... quien desde luego lo está es Iberdrola. Mucho de lo que nos está pasando es por la corrupción", informó el secretario y portavoz de Stop Uranio.
"La empresa", añadió Barrueco, "ha dado dinero a los ayuntamientos de la zona a los que paga las fiestas, subvenciona los equipos deportivos, se anuncia en los medios de comunicación... 'La Gaceta' está vendida a Berkeley, nos ataca constatemente. 'El Norte de Castilla' no nos cita ni para mal; nos silencia totalmente. La Universidad de Salamanca, que parece mentira a pesar de sus 800 años, mantiene una actitud vergonzosa, y hay que ir a la Universidad de Castilla La Mancha a buscar profesores que hagan informes; tal vez porque el presidente de su Consejo Social es el presidente de Iberdrola, José Ignacio Sánchez Galán, que es de Villavieja de Yeltes, una de las localidades afectadas. Además, Berkeley tiene contratados a 50 trabajadores de los pueblos de la zona, que están sin hacer nada, salvo levantar y quitar vallas, arrancar árboles y hacer una balsa para dar imagen de que han abierto la mina. A estos trabajadores, de cuando en cuando, la empresa los mete en un autobús y los lleva por ahí para que pidan la apertura de la explotación. Es muy difícil luchar por los apoyos comprados".
José Luis Moro, vecino de Villares que se desplazó a Valladolid, intervino en el debate para hablar de la fractura social provocada: "Tengo a familiares contratados por Berkeley que me dicen que estamos fastidiando el futuro de nuestros hijos, que vamos en contra del futuro... A ellos les he dicho hace tiempo que nos veremos en el entierro de mi padres".
A todo ello hay que añadir las amenazas y querellas de Berkeley. Al propio Jose Ramón Barrueco le pidió el año pasado 500.000 euros por el hecho de dar charlas como la que dio ayer en Valladolid. Ahora mismo está en el juzgado otra querella contra Jesús Cruz, autor de un blog, que se opone al proyecto minero, que saltó a los medios de comunicación el pasado mes de marzo por denunciar la tala 1.700 encinas sin permiso e incluso algunas fuera del espacio de la concesión. [WWF calcula que si se hace la mina serán talados más de 30.000 árboles].
"De abrir la mina de Retortillo -y el resto que tienen previsto- y la planta de tratamiento, se acabará con la agricultura y la ganadería, con el turismo, con todo un espacio, Europa Red Natural 2000, que incluye las riberas de los ríos Huebras, Yeltes, Uces y afluentes. No puede esgrimirse la creación de empleos, pues habría que cerrar el balneario que existe desde 1905 a escasos metros y en el que trabajan bastantes vecinas. El peligro no solo es la extracción a cielo abierto mediante explosiones y expulsión de polvo radioactivo para la atmósfera con efecto negativo en la salud. El gravísimo problema de salud no ha sido evaluado. Las consecuencias son tan negativas que no podemos consentirlo", expresó el representante de Stop Uranio, quien informó de la ampliación del proyecto de la mina de Retortillo a la zona 7, "lo que implica que la valla de la mina se encontraría a unos 35 metros del colegio Centro Rural Agrupado ‘Río Yeltes’. "En el País Vasco", añadió Barrueco, no abren una mina de estas ni de coña. Aquí se aprovechan de la despoblación generalizada, del envejecimiento de los que quedan, de la perdida de valores, entre ellos, la defensa de la tierra, y de las presiones políticas".

Margarita Mediavilla habló del panorama energético en España y del papel que juega el uranio en la presente crisis en la que las energías no renovables están dando muestras de agotamiento, dijo la profesora de la Universidad de Valladolid, miembro de Ecologistas en Acción y colaboradora de últimoCero.
"El uranio nos da fundamentalmente electricidad. Las reservas de uranio nos dan los biocombustibles; es una mala solución. El uranio queda lejos del petróleo, del gas... El uranio no nos va a salvar de la crisis energética", según la profesora del Grupo de Investigación en Energía Económica y Dinámica de Sistemas de la UVa, quien explicó la baja de la tasa de retorno de la energía.
Mediavilla justificó el por qué la energía nuclear no va a ser la solución. Ni la fisión nuclear, que solo produce electricidad, ni la fusión nuclear en cuya tecnología se lleva investigando 50 años. "Un primer reactor no estará listo hasta los años 2035-2040, su extensión no llegará hasta el siglo XXI", aseguró la docente, que comentó las pocas reservas de uranio que hay por lo que su extracción no es rentable. En Europa solo hay una mina de uranio, en Rumanía. La vida productiva de la mina de Retortillo será de poco más de diez años, dijo.
"El uranio de los reactores nucleares se está acabando; de ahí la vuelta a las minas de uranio. El problema está en que los reactores y la tecnología se encarece cuando hay poca demanda; en la actualidad salen muy caros", expresó Mediavilla, quien a su juicio "no hay un despertar nuclear como nos quieren hacer creer".
"El problema hay que enfrentarlo de forma sistémica y no vale poner parches cuando a la crisis energética se una la económica, financiera y ambiental. Todas las crisis actúan juntas y hay que enfrentarse con todas estas crisis a la vez", manifestó la profesora, para la que la solución está en cambiar de sistema.
"Hay que ir", añadió Mediavilla, "a un mundo de baja energía, a un urbanismo sostenible, a un cambio de dinámica económica. Se debe atacar, cambiar o hacer una alternativa a esta dinámica".
Manifestación
La charla en el Ateneo Republicano tuvo lugar poco después de que la Audiencia Nacional estudiará, como pedían IU-Equo, la legalidad del permiso de instalación de la mina, la declaración de impacto ambiental. Lo hará después de haber desestimado el recurso con las alegaciones de Berkeley en que la Declaración de Impacto Ambiental era firme.
José Ramón Barrueco, que recientemente viajó a Bruselas, informó en Valladolid que el alcalde de Villavieja de Yeltes, Jorge Rodríguez, ha convocado una manifestación en la ciudad de Salamanca en contra del proyecto minero de Berkeley el próximo domingo 26, a las 12.00 horas, desde la Plaza de Anaya a la Plaza Mayor.
A esta manifestación, convocada por el Ayuntamiento de Villavieja de Yeltes junto con Stop Uranio y Salamanca Antinuclear, seguirán otras.
"A primeros de año tendrá lugar una gran manifestación, a la que estáis todos y todas invitadas a acudir", expresó Barrueco, que confía en el 'efecto transfronterizo' [Retortillo está a 30 kilómetros de Portugal].
Margarita Mediavilla, por su parte, aseguró: "Esta batalla la vamos a ganar, como ganamos la de Garoña y ganaremos la de Almaraz".